domingo, 30 de septiembre de 2012

Sin palabras



Foto: E. Fernández 
Sé que esta tarde las palabras quieren abandonarme,
quieren dejarme como un juguete viejo
que se  abandona en cualquier rincón
de la casa,
se muestran  esquivas,
como suele hacerlo el silencio sin pedirlo o llamarlo
 y  cuando llega quiere quedarse,
y se queda
guardando las palabras en algún lugar
que desconozco,
tal vez, para otro día,
para esos días que se alargan sin motivos
y parecen un poema desierto.
Quizá no quiera oírlas,
quizá no quiera oír el mundo que grita  
con otras palabras que quieren despertarme
de este letargo de otoño.
 Quieren dejarme sola, lo sé
 y muda para que no diga nada, para que no las denuncie
ni las critique
quieren marcharse sin más,
sin mí,
quieren volar por el aire y olvidarme
en esta tarde que las busco
y las rebusco en el desván de las cosas viejas
pero se esconden con miedo,
 y no sé por qué,  yo solo quiero amarlas.

miércoles, 26 de septiembre de 2012

En Café de Palabras: La pasión.

Fotografía  E. Fernández

DELIRIO

Después de ese beso sobre los labios, a mi piel llegó un verano tórrido extendido por todo mi cuerpo. Así apareció la pasión a mi vida, una tarde en la que sentí un desierto en mi boca y la necesidad de beberme todos tus besos de un trago, de emborracharme con tu aliento, de fundirme en un abrazo y contigo saciar el hambre que tengo de ti a todas horas. Siento esta herida abierta en mitad de mi pecho que sangra cada vez que se cruza tu mirada con la mía, cada vez que tu voz me desviste el alma en silencio y sólo yo me siento desnuda ante la multitud. Ojalá pudiera arrancarme el corazón y plantarlo en una maceta, y que de él brotaran las raíces de un árbol y dieran el fruto de mi anhelo; este deseo loco que me provoca el pensar tu nombre.
 Y llegan los celos como abejas negras , cuando tu presencia arranca una sonrisa en la cara de  alguien  que no soy yo. No puedo vivir con esta duda y con esta llaga que levanta mil ampollas en mi recuerdo al no tenerte. Camino a ciegas por este senda porque tus ojos son los únicos que me devuelven la luz a la vida. Hago oídos sordos de las habladurías que pretenden romper este lazo que he tejido con el hilo de mis sueños y aspiran bordear los tuyos aún en la distancia. A pesar de todo, quizá me conforme con que me cojas las manos y sostengas mi delirio.

Café de Palabras -  24 de Septiembre de 2012

jueves, 13 de septiembre de 2012

Este Jueves: Ojo por ojo




Al llegar a casa su esposa irradiaba una alegría inusual y le felicitó. Él le dio las gracias y la miró por el rabillo del ojo, antes de sentarse en el sofá.  Unas horas antes rodeaba entre sus brazos a una estudiante de derecho en su despacho. Aquella era su forma de conquistar a sus jóvenes ayudantes becarias. Siempre lo hacía con una mezcla de  improvisada naturalidad al  elogiarlas por su buena labor en el gabinete. Así, sus abrazos   se alargaban tanto que, esa tarde al igual que otras,  después del achuchón  también le crecía la entrepierna.
-Mira guapa, como me pones.-  le decía mientras colocaba la mano de ella sobre  la bragueta  con el pene erecto.
En ese momento  esperaba el cuerpo desnudo  de la joven junto al calor del suyo, pero esta vez,  la chica buscó la mano de él y la colocó a la altura de su sexo.
-Mira guapo, aquí tengo lo que te hace falta.  Tu mujer me dijo que además de unos buenos melones te encantaban las cebolletas y ha tenido el detalle de regalarte esta enterita por tu cumpleaños.

Más venganzas en casa de Tere Puntos Supensivos

jueves, 6 de septiembre de 2012

Este Jueves un relato: relaciones.

Desde el mismo instante en que te vi sentí que lo nuestro iba a ser una aventura, quizá por eso desde el principio noté cierta zozobra e inquietud, compensada  ésta  por  la ilusión que había puesto   a la vuelta del verano de hace ya tres años.  Nuestra relación comenzó un 5 de Septiembre, cuando  el tono de los días conquista poco a poco los colores ocres del otoño. No sé si fue una nostalgia antigua la que hizo que caminara a tu lado, pero andaba nerviosa por ser la primera vez que tenía una relación tan extraña.  Y para romper el hielo nos dedicamos una canción  que comenzaba: 

Y comprar, y comprar un cuento
ay azulito como el cielo...
y escribir, y escribir una historia
regaíta de sufrimiento...
y escribir, y escribir, y escribir,
así me paso to er día pensando
pá vivir, pá vivir, pá vivir
pá vivir despierta y soñando...

El primer año de vida tuvimos nuestras primeras crisis existenciales, la convivencia fue un verdadero tira y afloja,  creo que me sentía sola ante tanta incertidumbre y te puse en el diván. En el segundo año casi estuve a punto de mandarte a paseo por falta de tiempo y dedicación, pero ocurrieron cosas maravillosas, conocí personas de muchos lugares de España y reconsideré nuestra relación. En este tercer año  nos hemos mirado con distancia,  quizá yo miré en otras direcciones, tal vez mi cansancio  me impida ver  el futuro que nos queda. Pero  estamos aquí, mi  querido blog.

Más relaciones varipintas en casa de mi amiga Chelo