martes, 3 de enero de 2012

Una ventana al mar.

El año 2011 se agotaba en el horizonte, dando las últimas pinceladas en el cielo con nubes sin trazos previos. El viaje nos va trasladando de un punto a otro, de un año al siguiente, de un terreno montañoso a un espacio de agua salina.



Y tal vez vivir sea esto, estar continuamente de viaje. Viajar en todos los a espacios, a través del tiempo, a través de los recuerdos, a través de los caminos andados y los que quedan por andar. Viajar por los sentimientos y las emociones que nacen para tener su propio trayecto, su propio viaje. Por eso nos desplazamos, para vivir como el agua, para recorrer la distancia igual que la música.

Comenzaba el año nuevo con una ventana al mar. A este otro lado, todavía me abrigaba el calor de la noche pasada, una calidez conocida, fraternal, un sentimiento de compañía tan inmensa e intensa como el azul que tenía frente a mí. Los recuerdos pudieron levantar olas tan altas, que hubiéramos muertos ahogados si no fuera porque podíamos mirar al horizonte igual que yo miro esta ventana, en la distancia. Me reconfortaba descubrir que salimos a flote, que en este gran barco ahora no hay marejada, que la noche fue también un viaje a poniente. Y aunque podríamos bucear con bastante profundidad decidimos navegar por placer, por el placer de encontrarnos bien, de estar juntos, de sonreír, de cumplir años en ese montón de velas, de sorprendernos como en la infancia, de vivir en ella por un rato al recordar nuestras travesuras.

La luz se estrenaba colándose por la ventana, e intentaba despejar mi sueño, pero la resaca aún persistía y desistí al encanto de seguir despierta, y me fui a dormir otro rato más. El año entero puede esperar a que sueñe hoy y mañana.



¡¡¡FELIZ AÑO 2012!!!

14 comentarios:

yraya dijo...

Precioso Encarni.
A la vida hay que dejarla correr así como el agua, mejor no aferrarse a nada y dejar la ventana abierta...
Buen año nuevo
Un besote

José Vte. dijo...

Muy bueno Encarni, estaría muy bien echarse a dormir y pasar los negros nubarrones que nos auguran. Y si además lo pasáramos de una manera tan delicada y poética como tu lo describes, entonces si que sería un sueño feliz.
Feliz 2012

Un abrazo

JValentina dijo...

Preciosa la entrada...seria estupendo echarse a dormir cuando esos nubarrones viene a descargar sombre nosotros,
esa ventana abierta al mar es un signo de esperanza ..de emociones, de sueños ....
te deseo lo mejor para este año
un abrazo

Dilaida dijo...

Preciosa entrada Encarni. Feliz año.
Bicos

emejota dijo...

Qué bonito lugar Encarni. El tuyo. Un placer sentir de esa manera cuando uno se reune con sus raíces y los cómplices de sus recuerdos. Feliz año y muchos bs.

San dijo...

Que maravilla Encarni, ese mar de fondo, ese pasar un año de mar de olivos a otro año de mar salino. Precioso.
Un beso.

Eastriver dijo...

Feliz año, felices sueños, y feliz posibilidad de gozarlo siempre, y de saber dejarte llevar por lo que sientes. Hermosas las fotos in itineri, también me gusta fotografiar cuando me muevo en coche, el resultado suele ser interesante. Y luego ese mar, que intuyo tan mediterráneo, y ese sol, y esa intensidad y esa inmensidad que nos hacen ser felices y vivir (y no solamente habitar) lo que vivimos.

Anusky66 dijo...

que belleza de paisajes y que hermosa forma de relatar el cambio de año.
Feliz 2012 preciosa que venga cargado de momentos felices y de buena compañía con quien compartirlos.

Unbesazo

mariajesusparadela dijo...

El pasado asumido en paz es el mejor de los futuros. Por eso no necesito desearte feliz año: ya sé que lo tendrás.

Montserrat Sala dijo...

Como me gustaría, dejar y empezar el año como tu lo pintas. Aunque sea solo un sueño, me apunto a la cola de sueños como el tuyo. Un poema todo tu escrito. Felicidades. Has estado muy inspirada.

Recibe un fuerte abrazo

Isabel Martínez Barquero dijo...

Feliz año para ti también, Encarni, y que en el viaje de la vida podamos seguir disfrutando de las letras que compartimos en estos espacios aún libres llamados blogs.

Esilleviana dijo...

Recibiste el año desde un mirador único: una ventana y una puerta junto al mar. Al fin y al cabo, contemplar el mar nos prepara para navegar y sucar las aguas, tal como invocan tus palabras-caricias: "Comenzaba el año nuevo con una ventana al mar. A este otro lado, todavía me abrigaba el calor de la noche pasada, una calidez conocida, fraternal, un sentimiento de compañía tan inmensa e intensa como el azul que tenía frente a mí".

un fuerte abrazo
:)

virgi dijo...

Feliz Año, Encarni.
Que sea plácido y creativo, con salud e ilusiones.
Ese amanecer al mar no podía ser mejor.
Muchos besos.

Ana dijo...

Estupenda manera de comenzar el año, cargando baterías con esa luz del sur, con la energía del batir de las olas...Hiciste muy bien en continuar con tu SUEÑO un rato más, vamos a tener año "pa hartarnos". Un beso.