viernes, 9 de julio de 2010

Y desapareció...


Y desapareció, como esa moneda en la mano de un mago, como un archivo en el disco duro formateado. Sin apenas dar explicaciones, se esfumó. No tenía de ella ni una imagen, ni el sonido de una voz, ni una pizca de olor, tan sólo era mi amiga virtual, lo poco que compartimos fueron las palabras alrededor de un chat; oye te gustó la película Delta? Pues no sé qué decirte, los paisajes eran hermosos, me gustaba el sonido del agua que contrastaba con la aspereza de algunas imágenes, muy duras. Nos podíamos pasar horas hablando a través de nuestros dedos y el teclado, y la noche no quería despedidas. Y un buen día no apareció, dejándome con un puñado de preguntas, y un enorme vacío. Desapareció con el sabor de una venganza, con una extraña incertidumbre. Yo también he desaparecido algunas veces, desaparezco cuando me hacen daño, cuando me mienten , cuando de forma egoísta no han contado conmigo, he hecho mutis por el foro cuando la escena no era mía, cuando alguien ha puesto un dialogo en mi boca y yo no he sido la guionista de esas palabras, he desaparecido otras veces cuando me he sentido cobarde y era mejor no dar explicaciones, he desaparecido cuando podía herir a alguien. Aquellos eran mis motivos para desaparecer, lo que no significaba que fueran los motivos de ella, por tanto fueran los que fueran sólo me quedaba respetarlos. De todos modos desconocía la mayor parte de su historia, no hablaba con un nombre, sino con un Nick, lo que podía tener muchas y variadas lecturas, y no me arriesgaba a descifrar un silencio voluntario, podría ser un hombre o una mujer, en estos casos nunca se está seguro del todo, pero de lo que estaba segura es que detrás había una persona, que por un tiempo compartió una mínima parte de su vida hablando de cine o de lo divino y humano que transcurría a nuestro alrededor.

Esta nueva forma de relacionarse y que acababa de descubrir carecía de todo cuerpo, es decir carecía de ese lenguaje visual que nos habla sin palabras y que desciframos con sólo ver los gestos, así que esta amistad quedaba reducida a las emociones, o en todo caso a la compañía al albor de nuestras palabras. Alguien me dijo que las personas vienen y van como los pájaros con las estaciones, entonces comprendí que debía pensar en pasado, que si alguien interrumpe un camino es mejor dejarlo volar.

Ahora después de un año aparece de la nada y dice que me estaba esperando, que me dará explicaciones, pero, no necesito que me cuente nada, en el espacio virtual somos un reglón detrás de otro y serán las palabras y el tiempo quien fije nuevamente en qué lugar o en qué estación se detenga ese pájaro. Detrás de mi Nick siempre estuve yo, esta mujer que todavía intenta descifrar el silencio, un silencio que causa distancia , pero que no preguntará, ya que si alguien calla lo mínimo que he de hacer es considerar el silencio como algo inherente a la persona, y por eso respetarlo. No hay nada más.


8 comentarios:

beker dijo...

Los nuevos formatos de relación social, como otros, tienen cosas buenas y malas. De toda la vida se ha quedado en un bar y tienes otros referentes; ahora se queda en un chat y pierdes otras referencias. Y pasan cosas asi y otras muchas, porque parece que el anonimato da licencia para casi todo. Una pena porque puede ser igual a cualquier forma de relación. Un abrazo

Ramirator dijo...

Lo terrible es cuando ésto sucede con personas a las que se conoce, de a pie. Cuando desaparece alguien a quien se ha cogido mucho afecto y no sabes si perdió el teléfono, o la agenda, o su vida tomó un rumbo inesperado, o si un traidor le habló mal de tí, ...., un accidente, un mal momento, un buen momento...

Siempre queda una melancolía con sabor agridulce. ¿Se acuerda de mí como me acuerdo de él/élla? ¿Qué ha sucedido? ¿Cómo le irá la vida? ...

Un abrazo.

Anónimo dijo...

Me he sentido rara leyendome en ese relato, tan rara como me senti el dia que apareciste. Estos dias sigo sintiendome rara y preguntandome si no apareces por el chat por falta de tiempo....

emejota dijo...

Nunca me han interesado los chats. Derivado del anglosajón "to chat = parlotear". No puedo juzgar la necesidad de chatear que tengan las personas porque la razón puede ser parecida a la de bloguear, si bien los principios y el respeto me parecen semejantes. A veces la vida resulta demasiado complicada para asumir la propia realidad y algunos necesitan soñar. Lo entiendo y lo puedo compartir, pero a través de un vehículo más.....que se yo.....digamos que "elaborado". De esta manera se puede conocer mejor la realidad de las personas, aunque usen un nick o se inventen una realidad alternativa, a través de los posts uno se "transparentiza". Resulta más fiable y si desaparece la persona casi se puede adivinar las razones por las que lo ha hecho, aunque no las exponga. Un abrazo.

Encarni dijo...

Beker, digamos que todo esto de la era digital lo estoy descubriendo poco a poco, si bien es cierto que esto genera un cambio importante en la forma de relacionarse, aún estoy un poco verde, sobre todo en asimilar estos cambios. Aunque estoy esforzándomde.

Un abrazo.

Encarni dijo...

JUDA, esto que me cuentas ocurre más de lo que crees, pero te diré que yo misma en la vida de a pie he dejado alguna amistad de la que ocurrió algo que me afectó de forma importante, no cuento nada más porque necesitaría un post, lo único que te diré es que yo tenía motivos o causas que nunca conté, de todos modos cuando he viajado a mi pueblo y la he visto, la he saludado con mucha alegría e incluso charlamos un rato, pero ya no es como antes. Tal vez algún día lo cuente y para ello necesataría tu opinión. Todo ocurrió alrededor de una baraja de cartas del Tarot.

Un abrazo desde el sur.

Encarni dijo...

Anónimo, yo también me sentí rara, después de tanto tiempo pensé que no volvería a verte por allí, alguna que otra vez, cuando el tiempo me lo permitía entraba, preguntaba por tí, y por otros/as y me quedaba un ratito. Lo cierto es que este año ha sido muy complicado, he estirado los días demasiado, y ahora el calorrrr me deja un poco sin fuerzas, he estado unos días haciendo limpieza y poniendo orden, en casa, en el ordenador, en todo. En fin ya nos veremos.

Encarni dijo...

Emejota, estoy de acuerdo contigo en que los principios y el respeto deben ser los mismos. Yo comencé a chatear desde el messenger pero solamente con familiares y conocidos/as más allegados, entrar en otro tipo de chat fue de forma accidental, participaba en un foro y quería conocer a la gente que participaba en él, sinceramente las primeras experiencias fueron bastante negativas, y en mucho tiempo no volví, pero me picaba la curiosidad y acaba entrando muy de tarde en tarde, no sé que trataba de averiguar, lo cierto es que aún no proceso muy bien todo este tipo de tecnologías a nivel personal. Incluso el blog, como te dije un día estuve a punto de cerrarlo y mi hija me convenció de que no lo hiciera. Supongo que soy un poco lenta en asimilar las cosas, o digerirlas, no sé.

Un abrazo.