miércoles, 26 de septiembre de 2012

En Café de Palabras: La pasión.

Fotografía  E. Fernández

DELIRIO

Después de ese beso sobre los labios, a mi piel llegó un verano tórrido extendido por todo mi cuerpo. Así apareció la pasión a mi vida, una tarde en la que sentí un desierto en mi boca y la necesidad de beberme todos tus besos de un trago, de emborracharme con tu aliento, de fundirme en un abrazo y contigo saciar el hambre que tengo de ti a todas horas. Siento esta herida abierta en mitad de mi pecho que sangra cada vez que se cruza tu mirada con la mía, cada vez que tu voz me desviste el alma en silencio y sólo yo me siento desnuda ante la multitud. Ojalá pudiera arrancarme el corazón y plantarlo en una maceta, y que de él brotaran las raíces de un árbol y dieran el fruto de mi anhelo; este deseo loco que me provoca el pensar tu nombre.
 Y llegan los celos como abejas negras , cuando tu presencia arranca una sonrisa en la cara de  alguien  que no soy yo. No puedo vivir con esta duda y con esta llaga que levanta mil ampollas en mi recuerdo al no tenerte. Camino a ciegas por este senda porque tus ojos son los únicos que me devuelven la luz a la vida. Hago oídos sordos de las habladurías que pretenden romper este lazo que he tejido con el hilo de mis sueños y aspiran bordear los tuyos aún en la distancia. A pesar de todo, quizá me conforme con que me cojas las manos y sostengas mi delirio.

Café de Palabras -  24 de Septiembre de 2012

11 comentarios:

MAMÉ VALDÉS dijo...

Las pasiones siempre van acompañadas de amor y de celos, seguridad, incertidumbre y delirio, son las mariposas en el estomago...

Un saludo.

Montserrat Sala dijo...

Mil mariposas revoloteando dentro del corazón del que siente una pasión como la describes tú. Desgarradora, desenfrenada, vital y única. Con la fuerza, que tu sabes darle.
Precioso.
Un besito, amiga.

Paco Tudela dijo...

¡Jesús! ¡madre mía!¡qué "desatamiento"!

virgi dijo...

Los celos que quisiéramos no tener, pero son más fuertes que nosotros.
Encarni, besos.

Juan Carlos Celorio dijo...

Una buena definición de lo que significa amar; su lado bueno y su lado malo.
Besos.

Esilleviana dijo...

"Sostener mi delirio", me encantó, será que ya tan solo me conformo con éso ... jaja.

Es precioso Encarni.

Un abrazo :)

diego dijo...

Encarna, tu primer párrafo es una maravilla por su fuerza y su carga pasional. Es una pena que el hombre no haya inventado la píldora de la pasión eterna. Y más pena que esa pasión pueda desaparecer de forma unilateral, dejando a uno de los dos sumido en el delirio de los celos. Pero a muchos nos ha ocurrido, en uno u otro sentido, y nos seguirá ocurriendo.

Eastriver dijo...

Bonita esa idea del corazón plantado y germinando. Hay una peli preciosa, El lado oscuro del corazón, en que el protagonista se arranca el corazón y se lo entrega a su amada... Es una metáfora, claro, pero ves ahí el corazón latiendo, entregado. Te recomiendo mucho mucho esa película hecha de poemas. Me la has traído a la memoria, quizá le dedique un post pronto. De verdad, tu texto me la ha recordado.

Ana dijo...

Una pasión muy poética, puro delirio de amor y deseo, caliente y precioso.

MIL BESOS.

Mariluz GH dijo...

La pasión es como la explosión de gas de las botellas de gaseosa, después de agitarla con fuerza... si no tienes cuidado te salpica toda dejándote pegajosa y sedienta ;)

abrazos de finde :)

San dijo...

Aparece la pasión despues de sentir el desierto en una boca y la necesidad de beberse todos los besos de otra.
!ay!
Cuanto delirio, cuantas pasiones.
Besos guapisima.